Quiero dedicar esta entrada a todos mis amigos, conocidos y clientes gallegos.., y también a otros que, sin serlo estrictamente, me siguen desde la hermosa y mágica tierra de Galicia.
Qué mejor forma que, para dar término a un viaje cargado de experiencias y aprendizajes, después de intensas jornadas de reiki e hipnosis, que visitar el santuario de San Andrés de Teixido, en uno de los lugares más recónditos y mágicos de la geografía española que imaginarse pueda. ¡Y eso fue lo que hicimos!
Lo que véis en la foto es un curioso elemento botánico, una hierbecilla que por aquellos pagos llaman "herba de namorar" (o sea, "hierba de enamorar"). Los científicos la conocen con el nombre de Armeria maritima, se considera como planta medicinal, y cuenta con numerosas subespecies.
También llamada "clavellina de mar", fue con lo primero que nos obsequiaron al llegar a San Andrés de Teixido, uno de los santuarios más representativos, según dicen algunos, del occidente celta. Esta aldea y centro importantísimo de peregrinación para los gallegos está ubicada al este del municipio de Cedeira, en la sierra de A Capelada, muy cerca de los acantilados sobre el mar.
Volviendo a la plantita, es muy representativa de las zonas costeras del hemisferio norte (especialmente en Europa), aunque también existe en algunas partes de América del Sur. Se da en lugares secos, arenosos, en condiciones salinas, sobre todo en playas, acantilados y marismas. Ha estado y sigue estando en peligro de extinción en España, debido al bestial desarrollo urbanístico de la costa en los últimos años, y también a la introducción de especies vegetales alóctonas e invasoras.
El hecho de que te la regalen las buenas gentes de San Andrés es porque la consideran un remedio infalible para el mal de amores. También la llaman "herba empreñadeira" porque, al parecer, mejora muchísimo el tema de la fecundidad en las mujeres (eso dicen los viejos del lugar, jajaja). La misma virtud se obtiene, según dicen, de la pila de agua bendita que se encuentra en el interior de la Iglesia, y en la cual reza, literalmente, que no se utilice para coger agua (aunque reconocemos que todos los que estuvimos allí cogimos, dejando la pila casi vacía). Para tal menester, en los puestecillos aledaños al santuario se venden a dos euros unas botellitas de cristal preciosas, con la imagen del santo (San Andrés).
De la hierba de enamorar, se dice que hay que hacerse con ella en la Noche de San Juan, noche meiga y hechicera por antonomasia... Hay que hacerla llegar de algún modo a la persona que se pretende conquistar, y la forma que recomiendan es metiéndosela en uno de sus bolsillos, sin que se dé cuenta.., y de esta forma, vuestros destinos quedarán unidos irremisiblemente. La floración de esta especie se da en invierno y principios de primavera, que es su mejor época.., y en estas fechas, los acantilados y las playas se llenan de pequeños matojos verdes, preñados de multitud de florecillas blancas y rosadas.
Sin embargo, y aunque nosotros hemos viajado allí en octubre, es recomendable ir a San Andrés de Teixido en noviembre... Esto es porque San Andrés se celebra en toda Galicia la noche del 29 al 30 de noviembre.., y digo yo que empezando por Todos los Santos, y acabando por San Andrés, estamos ante una de las épocas del calendario más proclives al contacto con lo sobrenatural y la formulación de hechizos ;-)
Pero en San Andrés de Teixido no solamente podemos encontrar referencias al ritual de la "herba de namorar": también nos encontraremos allí con los milladoiros, con la fuente de los tres caños, con el ramo de San Andrés y con las figuritas hechas con miga de pan ("sanandrexiños")... ¡Yo he traído unas figuritas de ésas para cerrar un capítulo de mi vida bastante chungo, que empezó hace aproximadamente un año y medio, y del que ya estoy bastante harta!
Y por supuesto, como buen lugar de culto a los muertos de orígenes paganos que se precie, San Andrés de Teixido contiene una vieja leyenda, expresada a través de una frase popular que jamás se me ha olvidado, desde que me la contaron: "A San Andrés de Teixido, vai de morto quen non foi de vivo". Esto quiere decir que existe la creencia de que, si una persona fue ofrecida a San Andrés, y no pudo asistir a su romería en este lugar en vida, acudirá a ella después de muerta, de una forma u otra, generalmente transformada en cualquier animalillo rastrero (lagarto, sapo o culebra).., y es por esto que en los alrededores del santuario, está mal visto matar a cualquier animal de estas características, porque los lugareños creen que son las almas en pena de los peregrinos que llegan a estos acantilados para cumplir con lo que no pudieron cumplir cuando eran personas.
El próximo miércoles seguiré contándoos las curiosas leyendas que pudimos aprender en este lugar costero, recóndito y muy, muy mágico... De momento, yo he guardado todas las "hierbas de namorar" que me regalaron, a ver si consigo que prendan en agua los esquejes, y las planto, para poder después irlas repartiendo por ahí... ¡Que veo que esto del amor viene haciendo mucha falta, sí señora!
Muchos besotes, ¡y me alegro de volver a casa :-)!
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2 comentarios:
Si es una planta en peligro de extinción, no deberías aceptarla como regalo y menos aún publicar que te la ofrecieron como obsequio. Eso alenta a la gente a recolectarla sin tener en cuenta que están haceindo un daño irrreparable a una de las plantas mas amenazadas de las costas gallegas.
Tienes toda la razón, Anónimo... Mea culpa! De hecho, deberíamos prescindir, añado, de todos los tfnos móviles y Pc, debido a las muertes y daños medioambientales q provocan en los países africanos. Gracias por la toma de conciencia!
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