Aloe Vera: tu aliado de belleza

Ha llovido mucho, pero muuucho desde que tuve la inmensa suerte y oportunidad de visitar la hermosa República Dominicana, hace un porrón de años, tantos, que ya casi ni me acuerdo... XDXD... Mentira: aparte de que es imposible olvidar un lugar tan bello, tengo que admitir que lo que tampoco se me olvidan son las impresionantes quemaduras solares que se me quedaron después de experimentar la fuerza del sol a latitud tropical. Yo nunca me quemo mucho, pero esta vez creo que sobrevaloré la capacidad de mi síntesis de melamina para protegerme. Como iba mucho en barco, el reflejo del sol sobre el agua me dejó un imborrable recuerdo en forma de extensas y dolorosas quemaduras sobre mi piel. Y en aquella ocasión fue la primera que yo tuve contacto con las virtudes del Aloe Vera, esa planta que se ha vuelto, con el paso del tiempo, tan popular en nuestras latitudes, tanto, que somos muchos los que tenemos un ejemplar, al menos, dentro de casa.

Tengo que reconocer que la idea para escribir este post me la ha dado mi cuñada, que es la proveedora oficial de plantitas de Aloe por estos lares en mi casa XDXD (gracias, Bárbara y Paco). En fin: como no podía ser menos, paso a enumerar las incontables virtudes de esta especie vegetal que supongo que muchos de vosotros ya conoceréis, al menos de vista o por entrar su composición en numerosas cremas y adminículos de belleza.

La especie que reconocemos como apta para beneficiarnos de sus mútiples propiedades es el Aloe barbadensis Mill., ya que existen numerosas variedades de estas conocidas plantas. Se utilizan las hojas basales, recolectadas en una planta adulta de más de tres años. Sobre el aloe, originario del norte y este de África, se ha escrito en época tan temprana como.., ¡en ciertas tablillas sumerias del 2100 a.C! Incluso se han encontrado dibujos relativos a esta especie botánica en antiguas paredes de templos egipcios.., ¡desde el 4000 a.C!

Cuando cortamos una hoja de aloe vera, podemos observar un jugo semitransparente que brota de su interior, como en la imagen. Este producto es altamente cicatrizante (y ya os digo, prácticamente mágico para las quemaduras solares), antiinflamatorio, antifúngico, antivírico, antibacteriano y desintoxicante. Actúa muy bien como depurativo, y activa las defensas naturales de nuestro organismo. ¡Menuda panacea!

Aparte del gel, del aloe se extrae también el acíbar, un látex o exudado desecado y amargo que es altamente purgante. Es un laxante estimulante, que no debe usarse por embarazadas y cuyo uso continuo puede causar habituamiento, como cualquier otra droga. Hay que tener mucho cuidado con el consumo del acíbar del aloe, por sus importantes contraindicaciones.

El aloe vera también se usa en multitud de productos de belleza. Es, por ejemplo, una de las mejores plantas para proteger y alimentar el cabello. Como es sumamente hidratante, se emplea en multitud de cremas para el rostro y las manos, e incluso para el cuerpo. Es tratante del acné juvenil, y elimina la suciedad de los poros. En algunos productos contra las picaduras de insectos también está muy extendido su uso. Contribuye a alisar las arrugas y es excelente como filtro solar, para reducir el tamaño de los poros y para reducir las manchas oscuras de la piel. Vamos, lo dicho: un absoluto aliado de tu belleza :-)

Aquí os propongo esta receta casera de crema de aloe vera para suavizar el paso del tiempo que tiene sus efectos en las arrugas de la cara. ¡Espero que os guste y os sea de utilidad!

INGREDIENTES CREMA ANTI-ARRUGAS.

- 100 gramos de pepino.
- 100 gr. de pulpa de aloe vera.
- Una cucharada de aceite de oliva.

Se coje el pepino con su piel y la pulpa del aloe en un mortero (también vale el vaso de la batidora). Se añade el aceite de oliva y se amasa bien con una espátula hasta obtener una pasta bien homogénea y sin grumos.

Lo ideal es untarlo por la noche directamente sobre las arrugas con un algodón o un pincel, dejándolo secar y permitiendo que actúe toda la noche. A la mañana siguiente, se retira el producto con un poco de agua tibia.

También os subo esta receta de crema hidratante en caso de heridas, quemaduras y supuraciones de la piel, hecha con aloe vera:

INGREDIENTES CREMA EMERGENCIA.

- 50 gramos de cera natural de abeja.
- 1/4 de litro de aceite de almendras dulces.
- 25 gr. de manteca de cacao.
- 50 gr. de pulpa de aloe vera.
- A elegir entre dos o tres de los siguientes aceites esenciales: lavanda, romero, salvia y tomillo.

En un bote de cristal de cierre hermético metemos la pulpa de aloe triturada, la cera de abeja previamente pasada por el rallador de cocina, y la manteca de cacao (también rallada). Se añade el aceite de almendras dulces y se cierra bien.

Se pone el bote al baño María, hasta que se disuelve todo bien. Si ves que no se disuelve convenientemente, coge el bote salvaguardándote las manos con algo contra las quemaduras (un paño o algo así), y agita con firmeza.

Sacando el bote, con cuidado de no quemarse se abre, y se añaden tres gotas de cada uno de los aceites esenciales. Todavía en caliente, se vierte el contenido en botes que hayas preparado previamente para guardar la mezcla. Antes de guardar, remover con un palito hasta que enfríe bien, para que la pulpa de aloe no quede flotando, y quede una crema homogénea.

¡Espero que os guste! ¡Muchos besos!