28 de noviembre, otra vuelta de tuerca: eclipse lunar

¿Alguna vez habéis disfrutado de la espectacularidad de un eclipse lunar total, cuando la Luna se pone roja como si fuera de sangre, y el cielo adquiere un tono extraño y macilento, distinto al habitual?

El próximo 28 de noviembre no habrá más que un eclipse de luna penumbral en el cielo (la contrafase del solar que tuvo lugar el pasado 13 de noviembre)... Se trata del último de este año (menos mal), y tendrá unas características curiosas, ya que la Luna está en su punto más lejano a la Tierra y se verá más pequeña. Podrá verse desde el oeste de los EEUU y Canadá, Europa, África, Asia, Indonesia y Australia. En España, podremos verlo al anochecer del miércoles que viene. ¡Nuestros amigos del oeste lo verán la noche del 27!

Se trata de un eclipse que provocará grandes alteraciones al pertenecer al mundo emocional lunar, y por encontrarse este astro en aspecto de quincuncio a los planetas Plutón-Marte, y asimismo a Venus-Saturno... Dicha configuración astral determina lo que los astrólogos llamamos un "Dedo de Dios": una figura de resonancias profundamente kármicas, que acontece cuando es necesaria una revisión a fondo de los contenidos subconscientes que operan en nuestra alma sin que nosotros lo sepamos.

No voy a negar que no me gustan nada esas dos conjunciones (Plutón-Marte y Venus-Saturno)... Sobre todo, porque aunque mi planeta más importante, Mercurio, está ya estacionario, sigo notando muchos efectos extraños a mi alrededor. Sé que hasta el día 4 de diciembre no voy a quedarme tranquila (el 5 obtiene en el cielo su máximo brillo, menos mal). ¡Pero no todo es malo, ni muchísimo menos! Este eclipse, al igual que al anterior, conlleva una oportunidad de transmutación muy profunda... Nos dará una oportunidad de oro para perseguir nuestro verdadero propósito espiritual, o "del alma", en estos precisos momentos. Es cierto que los eclipses lunares a veces están asociados a terminaciones emocionales o pérdidas.., situaciones que, a la larga, nos hubieran llevado por mal camino, aunque en los dolorosos momentos en que ocurren no queramos enterarnos.

Advertencia: ojo con las relaciones con el sexo opuesto. Pueden darse dolorosas rupturas, malentendidos y fracasos varios. También pueden surgir relaciones apasionadas de índole descontrolada, que nos "quemen" y que nos desilusionen rápidamente, porque serán más bien de corta duración. Además, no recomiendo alcanzar acuerdos ni firmas importantes hasta el día 4 de diciembre, más o menos, por la especial configuración astral que existe en estos momentos. Pueden existir pérdidas económicas y emocionales fuertes, así como agonías del alma, reacciones emocionales muy violentas, cosas que salen a la luz y que se habían mantenido ocultas durante mucho tiempo, o manifestaciones pasionales histéricas, imprevistas y desagradables. Una disposición importante es que Kethu, la Cola del Dragón según la astrología védica, durante este día estará conjunto a la maléfica de doble naturaleza Algol, la "Cabeza de la Medusa"...

¿Recomendaciones? Honestidad, verdad y justicia en el tratamiento a nosotros mismos y a los demás durante el miércoles 28 especialmente.., y hasta mediados de la semana que viene, aplicando todo esto con el mayor rigor posible... Os recomiendo también realizar este ritual (si lo deseáis) para paliar en mayor medida los efectos de los cielos sobre vosotros :-) Hacedlo por la noche, cuando estéis más tranquilos/as o hayáis vuelto de trabajar:

Una velita pequeña blanca
Sal
Agua bendita o tratada con reiki en un vasito pequeño.., o purificada con una jarra brita, por lo menos, o a la que se haya dedicado una pequeña oración para limpiarla
Incienso (preferible el sándalo o el limón)
Tres hojas pequeñas de papel y un lápiz y lápiz

Toma primero un pequeño baño ritual para limpiarte, añadiendo al agua algunas gotitas de tu esencia o perfume favorito... Es muy recomendable la lavanda, por ejemplo.

Visualízate liberándote y soltando en el agua todos tus bloqueos y miedos, como si fueran capas de suciedad que se desprenden de tu cuerpo.

Haz una afirmación mental lo más fuerte que puedas, en el sentido de que estás preparado/a para pasar al siguiente nivel en tu vida, para enfrentar la verdad y para abrir tu mente y tu corazón.

Después de tu baño, coge la velita y préndela (preferentemente con una cerilla), así como el incienso, mientras intentas que tu respiración sea tranquila, acompasada, profunda y rítmica... Echa también un poco de sal en el agua, e inclinándote un poco ritualmente delante del incienso, pide interiormente claridad mental, espiritual y emocional a tus Guías, Maestros, a tus seres queridos fallecidos, a los Ángeles, Santos o dioses.., a cualquier ser corpóreo o incorpóreo que constituya tu sistema de creencias... ¡Pide con la mayor fe que puedas, y con la total esperanza de que vas a ser escuchado!

Di en voz alta tres veces: "así como este fuego es encendido, así como este agua es purificada, así en esta noche mi Espíritu me guiará con fuerza hacia mi verdadero Destino, y mi mente, corazón, pensamientos y emociones lo seguirán, limpios de toda mala influencia".

Coge un papelito, y escribe en él tres, y sólo tres propósitos para tu vida que quieras llevar a cabo o alcanzar con todas tus fuerzas... En otro papel, apunta tres y solo tres cosas de tu vida actual que no te gustan, y de las cuales desearías desprenderte; por último, en el tercer papel, apunta aquello que crees que te hace más daño, lo que te limita, te encarcela y te impide alcanzar tu pleno potencial.

Di en voz alta sólo una vez: "En el nombre de Todo Cuanto Existe, del Absoluto, del Amor Incondiciona que me ampara, yo pido que esto se cumpla para el mayor bien de mi alma".

Ahora quema los tres papeles con cuidado en la llamita de la vela, sumerje los restos y cenizas en el vasito, y tíralos por el inodoro. Vete a acostar y descansa con la convicción interna de que tus peticiones están siendo escuchadas y respondidas.

¡Y nada más! Que el próximo eclipse de Luna te aporte luz en la oscuridad, y que te sirva para deshechar hasta los últimos resquicios de dolor que puedan aferrarse a tu corazón.

¡Mucha suerte y besotes!