Tantra, ¿sexualidad sagrada? Primera Parte

Tantra: según la definición, tradición esotérica que enseña a utilizar la fuerza de nuestros deseos para alcanzar la realización personal. Se contrapone a aquellas otras tradiciones que enseñan que es necesario renunciar y apartarse de los estímulos que aporta el deseo para llegar a la iluminación.

Tantra, esa palabra tan traída y tan llevada... Algunos piensan que tan sólo se refiere a algún tipo de "magia sexual". Bien: considero que esta acepción no es del todo correcta, pero como yo soy tan sólo una aprendiz en muchos aspectos, prefiero publicar más bien aquí el extracto de una entrevista realizada por la revista Universo Holístico al maestro Ramiro Calle, que sabe mucho mejor que yo de lo que habla cuando se refiere al tantra.

Ramiro Calle es un maestro y escritor especializado en yoga. Ha sido pionero en España a la hora de introducir esta disciplina. Desde 1971 dirige el mayor centro de yoga en nuestro país, Shadak, por el que han pasado más de 300.000 personas. También ha impartido clases en la Universidad Autónoma de Madrid, y dado conferencias en multitud de lugares. Os recomiendo, para más información sobre este hombre, que pulséis el enlace: realmente se trata de una autoridad, no de un advenedizo cualquiera, y es respetado por doquier a donde quiera que va.

Sin más, dejo paso al extracto de la entrevista.., la primera parte, porque es larga, y mañana publicaré la segunda.

Cuando hablan los sabios, hasta el mar enmudece.

¡Besotes!
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"Tantra (del sánscrito tantra, propiamente "telar" o "urdimbre": conjunto de escritos y prácticas hindúes o budistas que ponen especial énfasis en el culto de la energía femenina, en prácticas de yoga a veces extremas y en la exaltación del mundo como medio para alcanzar la iluminación" (RAE).

Universo Holístico: ¿Cuál es el origen del tantra?

Ramiro Calle: Es un movimiento esotérico/espiritual/filosófico que surge antes de la era cristiana, aunque no se sabe la fecha exacta. Es muy antiguo, pues se basa en lo que se llamaba "el culto a la Diosa", el culto a la matriz, que ha estado en la base de muchas otras religiones, culturas y latitudes del mundo. Es un movimiento que se inspira en la "shakti", que es la energía femenina, la energía cósmica que, por extensión, es la Diosa (...) La Diosa está palpitante en cada mujer como energía femenina cósmica (...). El tantra se ha asociado en Occidente con un método sexual, eso ha hecho que se degrade como filosofía. Se trabaja como un yoga sexual, incluso se ha hecho un paralelismo, que aún lo degrada más, con el uso falso que se puede inspirar o surge de manuales eróticos muy famosos, como el Kamasutra y el Anakarranka. No existe la menor conexión entre el Kamasutra y el tantra, sólo que muchas personas, unas por ignorancia, y otras por malintecionadas, tratan de asociar esos manuales eróticos que, a veces, obligan a ser faquir por ser casi circenses para hacer el amor, por sus posturas acrobáticas y casi imposibles. Lo mezclan para confundir a las personas, y darle al tantra un carácter sexual que no tiene.

En el tantra, la sexualidad ocupa un 10%, el resto son enseñanzas para la transformación de actitudes, para ir poco a poco conciliando en uno las energías positiva y negativa (...). El Hatha yoga, el auténtico, no el que se está dando ahora que está tan adulterado, es también tantra. Si hubiera que definir el tantra, diríamos que es un sistema para aprender a orientar todos nuestros planos y todas nuestras energías: el plano motriz (el movimiento); el plano instintivo; el plano sexual; el plano mental; el plano emocional; y el plano supramental. El tantra con sus métodos, técnicas, enseñanzas y ejercicios nos enseña a poder movilizar y manipular todas las energías de estos planos.

U.H: Siendo tan hermoso es una pena que esté infravalorado y enrarecido

R.C: Efectivamente, pues donde más caraduras hay por metro cuadrado es en el tantra. Pues hay infinidad de pseudoprofesionales que con el pretexto del tantra, lo único que hacen es dar rienda suelta a su afán compulsivo de coleccionismo de contactos sexuales. Está muy bien que cada uno utilice la sexualidad como quiera, pero por qué hay que utilizar unas enseñanzas milenarias que, en realidad, nada tienen que ver con el desenfreno sexual.

La sexualidad consciente ocupa un lugar en el tantra. El ser humano, respecto a la sexualidad, puede optar por tres actitudes o sendas:

- Una, la inhibición de la sexualidad, como hacen los renunciantes, para transformarla en energía espiritual. Esto es propio de los monjes, anacoretas, eremitas, etc. Ellos voluntariamente contienen su energía sexual, su libido, para transformarla, para sublimarla (no para reprimirla).

- Dos, la opción del ser humano corriente, lo que se llama "la utilización cotidiana de la sexualidad", que en muchas ocasiones está desprovista de cualquier sentimiento, como decía D.H Lawrence ("la mayoría de los seres humanos fornican como perros, en lugar de como seres humanos")... Esta modalidad puede ser sexualidad por la pura sexualidad, sexo divertido, sexualidad amorosa, o sexualidad por amor, dependiendo de las personas.

- Por último está la sexualidad tántrica, que es una sexualidad muy especial, no es para todos los días, pues tiene connotaciones de sacramento. Es realmente un rito en el que la pareja, habiendo recibido una serie de enseñanzas, requisitos y entrenamientos, alarga mucho el abrazo amoroso, la cópula, para crear lo que se llama un campo electromagnético de energía muy poderosa, de cuerpo a cuerpo, de chakra a chakra, de ser a ser, lo que favorece la ascensión de la conciencia provocando una especie de trance místico o una situación que se puede homologar a ese trance.

Cuando se establece esta relación mística entre la pareja, ésta se está homologando a una situación similar al trance que logra establecer la conexión entre el Dios y la Diosa... Él representa al Dios, y ella representa a la Diosa, y se produce una especie de "teatralización" de todo lo que ha sido desde el principio de los tiempos, cuando Dios desplegó su energía y con ella formó el mundo.

En esta sexualidad tántrica, el hombre debe controlar su mente, la respiración y el esperma; la mujer debe estar muy atenta, muy sensitiva a todo ese proceso que es, digamos, una erótica mística, casi sacramental, sexual a través de los cuerpos y a través de las almas. Es un ritual, pero ese ritual no es para todos los días. Es posible que los tántricos lo realicen una vez cada tres meses.

En el yoga, así como en el tantra, se insiste siempre en que hay que estar continuamente consciente, lúcido hacia todo lo que hagamos, como dicen los maestros Zen: "Cuando como, como; cuando paseo, paseo; cuando duermo, duermo".., pues así, al hacer el amor, en lugar de esperar a que las energías se disipen, se dispersen, el tántrico las utiliza como "trampolín", como catapulta para elevar la consciencia a un estado superior, más elevado, donde se desarrolla la intuición. Esto se produce gracias al flujo de energías poderosísimas entre los miembros de la pareja tántrica. El placer no se convierte en un fin, se convierte en un medio para la autorrealización y la trascendencia. La relación tántrica, si no va acompañada de una serie de prácticas para la autorrealización (de meditación, de concentración, etc) no sirve para nada. En ese caso, es mejor llevar a cabo una relación sexual normal, y no decir que eres tántrico o que das clases de tantra".

MAÑANA MÁS, SEGUIRÉ CON EL ARTÍCULO